El Manchester City y Guardiola aún respiran

Manchester City venció de forma agónica por 2-1 a Aston Villa en el Etihad Stadium este martes, en un verdadero partidazo crucial de la Premier League. 

El encuentro era una final para ambos al ser rivales directos en la pelea por una plaza en la próxima UEFA Champions League.

Fue un triunfo justo por lo que fue el trámite del partido, que prometía desde el vamos. 

Apenas al minuto Marcus Rashford estrelló una pelota en el palo del arco defendido por Stefan Ortega Moreno. 

Sin embargo, el gol sería Sky Blue. Bernardo Silva, a los 7´, concretó una larga posesión de los Citizens aprovechando un desborde y pase al medio de Marmoush, que lo encontró casi en el punto penal. El remate tomó por sorpresa a un Emiliano Martínez que no pudo hacer nada frente al remate del español, más que desviar hacia adentro de su arco.

Parecía que los de Manchester impondrían condiciones, con la ventaja y la pelota en su poder. Pero poco duró la ilusión. A los 17´, una acción polémica le daría la chance de igualar al Villa. Rashford, de penal, marcó el 1-1 tras una discutible falta de Rúben Dias sobre Jacob Ramsey, cobrada por el árbitro luego de haber ido al VAR.

Todo seguiría igual hasta los 93´. Cuando el partido parecía irse en empate, un gran desborde de un Jérémy Doku fresco, ingresado para los últimos 15´, terminó con un pase al medio que terminó conectando Matheus Nunes en el segundo palo, para desatar la locura de Pep.

El triunfo ante un rival directo termina siendo vital para el City. No solo porque casi asegura su lugar en la próxima Champions, sino por el calibre de las cinco fechas que le quedan por jugar. Y Aston Villa todavía sueña, aunque perdió puntos clave. Ahora ocupa el lugar de Europa League, con un Chelsea acechando a apenas un punto y con un partido menos.

El equipo de Guardiola aún debe enfrentar a Wolves (2/5), visitar a Southampton (10/5), recibir a Bournemouth (18/5) y viajar a Fulham (25/5).