Evita EU ´parálisis federal´ tras votos demócratas

Estados Unidos logró evitar el viernes la parálisis del gobierno federal gracias a la aprobación de un presupuesto provisional impulsado por el presidente republicano Donald Trump. 

Pese a la resistencia dentro de la oposición demócrata, algunos de sus senadores cedieron a la presión y votaron a favor de la medida, permitiendo que el gobierno continúe financiado hasta septiembre.

La aprobación del presupuesto se concretó a pocas horas de la fecha límite de la medianoche, lo que evitó el temido "shutdown" que habría dejado a cientos de miles de funcionarios en desempleo temporal y afectado servicios clave como el tráfico aéreo y la asistencia alimentaria.

Sin embargo, el texto incluye nuevos recortes al gasto federal, una medida que ha generado críticas por parte de la oposición y algunos sectores sociales.

Aunque los republicanos cuentan con una mayoría de 53 senadores en el Congreso, necesitaban 60 votos para aprobar el presupuesto. Para ello, recurrieron al apoyo de ocho demócratas, quienes, a pesar de su rechazo a los recortes incluidos en la propuesta, optaron por respaldar la iniciativa para evitar la crisis administrativa.

El giro en la postura del líder de la minoría demócrata en el Senado, Chuck Schumer, fue determinante para la aprobación del texto. 

El senador por Nueva York anunció el jueves que, pese a sus reservas, votaría a favor de la medida para evitar "mayores daños al pueblo estadounidense" derivados de un cierre gubernamental prolongado. El debate en el Senado estuvo marcado por tensiones dentro del Partido Demócrata. 

Mientras que figuras progresistas abogaban por bloquear el presupuesto como una forma de desafiar la política de recortes de Trump y su aliado Elon Musk, otros, como el senador Dick Durbin, justificaron su apoyo argumentando que "lo último que necesitamos es hundir aún más a nuestro país en el caos y la confusión".

Un centenar de manifestantes se congregaron el viernes por la mañana frente a la residencia de Schumer en Nueva York para protestar contra su respaldo al presupuesto impulsado por Trump.

Uno de los puntos más polémicos del texto es el aumento de 6,000 millones de dólares en el presupuesto de defensa, mientras que otras áreas del gasto público sufrirán recortes de hasta 13,000 millones de dólares. 

Estas medidas se suman a los despidos masivos de funcionarios que Elon Musk ha llevado a cabo bajo la dirección de la comisión de eficiencia gubernamental (DOGE), creada por Trump.

Desde su regreso a la Casa Blanca, el multimillonario republicano ha respaldado a Musk en su iniciativa de desmantelar agencias federales que considera "ineficientes o corruptas". 

Esta política ha generado fuerte oposición en el Congreso, con críticas de líderes demócratas como Nancy Pelosi, quien calificó la situación como "una falsa elección entre el cierre del gobierno o un ataque devastador contra el bienestar de las familias estadounidenses".

Por su parte, Trump celebró la decisión de Schumer, calificándola de "muy sabia e inteligente" y asegurando que podría llevar a "algo grandioso para Estados Unidos". 

Su reacción dejó entrever la influencia que ha ejercido sobre sectores de la oposición, que se vieron forzados a negociar para evitar un escenario de inestabilidad.

A pesar de la aprobación del presupuesto, la división política en el Congreso sigue siendo profunda, y los demócratas temen que el uso de financiaciones temporales reduzca el poder del legislativo sobre el gasto público, otorgando mayor discrecionalidad al Ejecutivo.