Recupera "Ian" fuerza rumbo a Carolina del Sur

 Ian se convirtió nuevamente en huracán este jueves en el océano Atlántico y de acuerdo a su trayectoria, se dirige rumbo a Georgia y las Carolinas, estados a los que ahora amenaza con inundaciones, marejadas ciclónicas y fuertes vientos, tras dejar devastado buena parte de Florida que apenas hacía un recuento de los daños y de los muertos.

Las cifras preliminares de muertes se elevan al menos a 15, según varios medios de Estados Unidos.

La tormenta inundó casas y dejó a casi 2.7 millones de personas sin electricidad.

En tanto, equipos de rescate pilotaron botes y caminaron por las calles inundadas para salvar a miles de personas atrapadas entre casas inundadas y edificios destrozados.

La devastación infligida en Florida salió a la luz un día después de que Ian azotara como un monstruoso huracán de categoría 4: casas inundadas en ambas costas del estado, se cortó el único acceso por carretera a una isla de barrera, destruyó un muelle histórico frente al mar.

En el área de Fort Myers , las casas habían sido arrancadas de sus losas y depositadas entre los escombros triturados. Los negocios cercanos a la playa quedaron completamente arrasados, dejando escombros retorcidos. Los muelles rotos flotaban en ángulos extraños junto a los barcos dañados y los incendios ardían sin llama en los lotes donde alguna vez estuvieron las casas.

En el área de Orlando, los bomberos usaron botes para llegar a las personas en un vecindario inundado. Los pacientes de un asilo de ancianos fueron llevados en camillas a través de las inundaciones hasta un autobús.

Los equipos de emergencia aserraron árboles derribados para llegar a las personas varadas. Muchos en las áreas más afectadas no pudieron pedir ayuda debido a cortes eléctricos y celulares.

El presidente Joe Biden dijo que “todo nuestro país sufre” junto con el pueblo de Florida después de que el huracán Ian inundó comunidades en todo el estado.

Durante una visita a la sede de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias, dijo: “Los números aún no están claros, pero estamos escuchando los primeros informes de lo que puede ser una pérdida sustancial de vidas”.

Biden dijo que visitaría Florida y se reuniría con el gobernador Ron DeSantis cuando “las condiciones lo permitan”.

"Este podría ser el huracán más letal en la historia de Florida", dijo el presidente.