Hablan sobre derechos humanos en un medio ambiente sano

Ante la preocupante situación ambiental que enfrenta nuestra entidad que cobra más de 5 mil muertes al año, la Comisión Estatal de Derechos Humanos llevó a cabo una jornada de reflexión sobre el derecho humano a un medio ambiente sano, en la que se contó con la participación de Carlos Álvarez, reconocido defensor ambiental con más de 30 años de trayectoria.

El especialista impartió la conferencia magistral "Afectaciones y desafíos en el derecho a un medio ambiente sano", en la que presentó datos contundentes sobre la contaminación atmosférica, la omisión de autoridades y las graves consecuencias en la salud pública. 

Dijo Álvarez  que todas nuestras normas ambientales son letra muerta. Nadie cumple, ni en emisiones, ni en agua, ni en residuos. Ni a nivel federal ni local.

La Presidenta de la CEDHNL, Susana Méndez, señaló que esta jornada representa un paso relevante en la construcción de estrategias jurídicas, sociales y ambientales en defensa de este derecho fundamental. 

Dijo que el medio ambiente es una condición previa para el ejercicio de otros derechos como la salud, la educación o una vida digna. 

"Resulta preocupante saber que más de 5 millones de personas de la zona metropolitana de Monterrey enfrentan una exposición crónica a sustancias químicas tóxicas debido a los altos niveles de contaminación atmosférica, lo cual genera graves consecuencias para su salud", subrayó.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud el impacto en la salud se estima en 7 millones de muertes prematuras al año por contaminación ambiental.

Para Nuevo León, se proyectan más de 5 mil muertes anuales asociadas a partículas PM2.5.

Señaló que la exposición crónica al plomo es un riesgo especialmente grave en la niñez, reduciendo significativamente el coeficiente intelectual.

El INEGI estimó que la degradación ambiental costó al país más de 1 billón de pesos en 2023, de esa cifra más de 800 mil millones se deben directamente a la contaminación generada por actividades humanas.

La red de monitoreo ambiental en el estado fue calificada como insuficiente y opaca, que se requieren al menos 14 estaciones adicionales para cumplir con los parámetros establecidos por la OMS.

Se identificó como principales emisores a pedreras, refinerías, cementeras, rellenos sanitarios, la quema de pastizales y el parque vehicular.

Reclamó la ausencia de un programa obligatorio de verificación vehicular en Nuevo León, pese a que está previsto en la ley.

La Presidenta de la CEDHNL también hizo referencia a las recientes contingencias ambientales registradas en la Zona Metropolitana de Monterrey, así como a las condiciones críticas en municipios como Cadereyta y García, pues dijo que no se trata de una amenaza futura, sino de una crisis presente.