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Enfrenta Pedro Castillo juicio tras golpe fallido

Enfrenta Pedro Castillo juicio tras golpe fallido
Castillo se declaró inocente y aseguró que solo expresó "los deseos del pueblo", calificando el juicio en su contra como una "farsa".

Publicación:07-03-2025
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La Fiscalía busca una condena de 34 años para el expresidente peruano, a quien acusan de grave abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública.

El expresidente de Perú, Pedro Castillo, enfrentó su juicio por los delitos de rebelión, grave abuso de autoridad y perturbación de la tranquilidad pública. 

Los cargos se derivan de su intento fallido de disolver el Congreso y declarar el estado de emergencia en diciembre de 2022, en un movimiento que fue interpretado como un intento de golpe de Estado y que polarizó a la nación sudamericana.

Castillo, quien no logró el respaldo militar para su medida, fue destituido rápidamente por el Congreso y arrestado poco después. 

Su salida del poder desató fuertes protestas, especialmente en el sur del país, donde al menos 49 personas perdieron la vida en las semanas posteriores. 

Su destitución también profundizó la crisis política en Perú, que ha enfrentado una serie de gobiernos inestables en los últimos años.

Tras su destitución, la entonces vicepresidenta Dina Boluarte asumió la presidencia y formó un gobierno conservador con apoyo de partidos tradicionales. 

El juicio contra Castillo se desarrolla en una base policial, donde ha estado detenido desde su arresto. 

La Fiscalía busca una sentencia de 34 años de prisión contra el exmandatario, quien llegó al poder en 2021 con una victoria sorpresiva sobre el establecimiento político peruano.

Castillo asistió al juicio con media hora de retraso y negó las acusaciones de rebelión en su contra. "Lo único que hice fue expresar los deseos del pueblo a través de un discurso", declaró en su primera intervención. 

En su intento por disolver el Congreso, el 7 de diciembre de 2022, el expresidente leyó un decreto en televisión nacional en el que anunciaba la convocatoria a nuevas elecciones, lo que derivó en su destitución inmediata.

El exmandatario no llevó un abogado a la audiencia y calificó el juicio como una "farsa" a través de sus redes sociales.

En su lugar, se le asignó un defensor público. Castillo también intentó que una de las juezas fuera apartada del caso, argumentando que ya había emitido opiniones sobre su intento de disolver el Congreso, lo que consideró una falta de imparcialidad.

Además del juicio, Castillo enfrenta otra investigación por corrupción, en la que se le acusa de otorgar ascensos irregulares a miembros del ejército y de manipular procesos de adquisición para beneficiar a determinados contratistas. Durante su gobierno, sobrevivió a dos intentos previos de destitución antes de su fallido intento de cerrar el Congreso a finales de 2024.

El presidente de Colombia, Gustavo Petro, se solidarizó con él y afirmó en redes sociales que el exmandatario está siendo juzgado por "ser pobre y de izquierda". 

Petro también criticó la postura del gobierno peruano, al que acusó de ignorar la voluntad de los votantes que eligieron al exmandatario

Mientras tanto, Perú se prepara para elecciones el próximo año, aunque la presidenta Boluarte ha señalado que cumplirá el mandato hasta su finalización.



« El Universal »