Critican la inactividad de Cuauhtémoc Blanco

En los primeros siete meses de su labor como diputado federal de Morena, Cuauhtémoc Blanco Bravo ha sido criticado por no presentar iniciativas ni puntos de acuerdo, además de no participar en votaciones clave sobre la legislación en favor de las mujeres. 

Su única intervención en el pleno fue relacionada con las acusaciones de violación en su contra. 

Aunque ha votado a favor de 51 asuntos, incluidos varios decretos de la "Cuarta Transformación", también estuvo ausente en importantes votaciones, como las reformas a la Ley General para la Igualdad entre Mujeres y Hombres.

Durante este periodo, Blanco no ha demostrado una participación activa ni en el desarrollo de propuestas legislativas ni en la discusión de temas relevantes, lo que ha generado inquietud entre algunos de sus electores. 

Su bajo perfil en las sesiones y la falta de un enfoque claro en sus responsabilidades han alimentado las críticas sobre su rendimiento en el Congreso.

Blanco, quien percibe un salario mensual de 79 mil pesos y ha recibido varias prestaciones, también ha obtenido recursos adicionales de su bancada. 

Su perfil político incluye una carrera como presidente municipal de Cuernavaca y gobernador de Morelos, pero no ha tenido un impacto significativo en la actividad legislativa hasta ahora. 

A pesar de su trayectoria política, que incluye roles en la administración local y en Morena, su desempeño como legislador ha sido discreto. Además, su suplente, Sebastián Ramírez Mendoza, tiene una destacada trayectoria en Morena y el gobierno de la Ciudad de México, lo que pone en duda la representación efectiva de Blanco en la Cámara de Diputados. 

Los ciudadanos y algunos analistas políticos han cuestionado la efectividad de su mandato en el Congreso, dado que no ha logrado destacar en su nuevo rol legislativo.

En términos de su desempeño personal, la falta de actividad legislativa de Blanco contrasta con las expectativas que muchos tenían al elegirlo como diputado, dada su conocida trayectoria política en Morelos. 

En lugar de convertirse en una voz activa en el Congreso, ha optado por un perfil bajo, lo que ha generado desilusión entre quienes esperaban que su experiencia como exgobernador fuera un aporte significativo para la legislación. 

Esto se agrava aún más por las ausencias en votaciones clave, lo que plantea dudas sobre su compromiso con los temas que afectan a la sociedad, especialmente en áreas como la igualdad de género y la justicia social.

Finalmente, la cuestión del salario y las prestaciones adicionales que Blanco ha recibido ha sido otro tema de debate.